lunes, 16 de enero de 2012

Hoy vamos a volar,





Un poco se dio: ¡Salió el viaje a Dubai! Y mi cabeza, ya conspira en contra mío, con la mil y un cosas que tengo por delante, que todavía no sé y que tengo que preparar. La primera reacción, cuando me llamaron, fue de una profunda, sincera y llana emoción. Me hablaron en inglés y muy temprano en la mañana. No entendía del todo qué estaba pasando y, aunque me cueste creerlo, no me salían las palabras para hablarle a la señorita de Recursos Humanos que, del otro lado del teléfono y en otro continente, sólo hacía su trabajo.

Hacía tiempo que venía debatiendo sobre mi futuro. Siempre se me presentó como algo muy incierto. Lleno de dudas, de idas y vueltas. La verdad es que, quizás hasta hace muy poco, ansiaba para mí, otra cosa. Algo más atado a títulos, o agentes de novela. Algo así como una super historia que cambiase el curso de la humanidad en forma de novela y/o ensayo literario.... así como también, una buena película en donde mi actuación sería tan alucinante para el ojo ajeno que llenaría las revistas de artículos.

Hoy me imagino algo bien distinto. Alejado, un poco, de aquel pasado lleno de laureles, me embarco, por primera vez, rumbo a lo desconocido. Sé que suena raro y quizás un poco "clichè" pero tengo ese presentimiento llamado: Me voy de casa para nunca más volver. Que si bien, un poco lo sentí en mi año en Córdoba, ahora lo siento mucho más profundo.

Se ve bien raro, en estos últimos dos meses que pasaron y gracias a mis amigos y gente que fui conociendo... terminé de cerrar un montón de ideas y llamemosle "conceptos" que venía trabajando. Me siento mucho más fuerte. Más decidido. Con más consciencia y sin dudas: con mucha más vida. ¡Estoy en el lugar que quiero estar haciendo lo que quiero hacer como yo lo quiero hacer". Me siento más maduro. No hay ningún tipo de prejuicio y/o calumnia que sienta pueda afectarme. Siento que mi vida es muy mía y que estoy siendo muy yo.

Me siento más tranquilo, más humilde, más viejo. ¡Aunque rebozo en juventud y eso me hace tener unas pilas increíbles! Me estoy yendo a vivir a Dubai y lo único que puedo pensar es: ¿Qué catzo pasará? Por supuesto, contrario a mi esitlo, no leí ni busqué mucho sobre Dubai. Quizás, en otro viaje, me hubiese armado de conocimientos teóricos, completamente inncesarios pero que harían que mi subsconsciente esté un poquito más seguro dentro de la inseguridad misma que supone el porvenir y, sin ir más lejos, el viajar.

No hice nada de eso. Estoy sintiendo todo como si fuese la primera vez. Estoy amando sin esperar que me amen. Estoy haciendo el amor, lleno de amor. Estoy regando mi jardín para que se vea verde y brillante. Estoy viendo el sol. ¡Hoy empecé la rutina de deporte, en donde, mis intenciones, son las de depurar las toxinas y llegar en óptimas condiciones a Dubai! Estoy levantándome temprano. Estoy preparándome para las vacunas, las valijas, los viajes, el stress, el estar en ciudad y ciudad, el estudiar,surf quizás... Estoy disfrutando todo lo que puedo a mis amigos. Estoy viendo gente. Saliendo de mi casa. Riéndome a carcajadas. Escuchando música electrónica a todo lo que da. Estoy siendo jóven, pero muy responsable y ¡esto me encanta!

Estoy lleno de vida, estoy con una emoción que no tenía desde hacía muchísimo tiempo. Ya no ansío para mí nada que no sea esto, o no espero más de esto sólo lo que realmente es y deba ser. Estoy viendo el presente como lo más lindo y poderoso. Mi plan de vida cambió unos 360º. Sin ningún tipo de ataduras. Un altruísta caminante que va a recorrer el mundo. ¡Nos vamos a comprar un velero y a viajar por el mar! No me voy a aburguesar. No voy a pensar en estupideces como títulos honoríficos o novelas de gran envergadura. No voy a hacer proyectos insensatos ni a vivir de prestado. ¡Mi vida es mía y la siento mucho!

Hoy... hoy... ¡vamos a volar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario